Por: Beto Hermoza
Los mejores pódcast muchas veces son identificados por la capacidad de su presentador de producir el audio de mejor calidad posible, mientras más limpio sea mejor será la experiencia del oyente y su capacidad de visualizar la conversación.
Los siguientes tips te guiarán a crear el ambiente perfecto para grabar tu programa y técnicas simples que te ayudarán a tener el audio más limpio posible con el mínimo esfuerzo de edición.
USA UN EQUIPO DE GRABACIÓN ADECUADO
Puedes grabar un pódcast usando el micrófono incorporado de tu laptop o cámara, pero no es muy recomendable. Idealmente necesitarás algunas piezas de equipo para grabar audio claro y profesional, especialmente una laptop (Mac o PC), un buen software de grabación (Protools, Cubase, etc.), una interface de audio y un micrófono de condensador ó dinámico. Esto es sumamente importante a considerar, porque tiene el mayor impacto en tu calidad de presentación.
HAZ CALENTAMIENTOS
Como te imaginarás, un pódcast requiere que hables mucho. En lugar de comenzar tu grabación con la voz en frío, calienta un poco tus cuerdas vocales leyendo tu guión en voz alta o recitando algunos trabalenguas. Un buen calentamiento antes de grabar mejorará tu habilidad de dicción y te ayudará a evitar trabarte o tropezar con las palabras.
GRABA EN UNA HABITACIÓN CERRADA Y SILENCIOSA
Grabar tus episodios en la habitación más pequeña y callada que tengas disponible reducirá los ecos y ruidos externos. Cierra tus puertas y ventanas, apaga cualquier dispositivo que haga ruido, y deja a tus mascotas en algún lugar donde no interrumpan por un par de horas. Llena tu lugar de grabación con objetos suaves (como colchones, almohadas, alfombras, etc.) que absorban el ruido y los sonidos repentinos. Bajo ninguna razón en el mundo grabes en el baño.
USA TU MICRÓFONO CORRECTAMENTE
Primero, ajusta tu micrófono de modo que esté a la misma altura de tu boca. Siéntate unos centímetros de distancia del micrófono y coloca el filtro de sonido (antipop) entre tu boca y el micrófono. Luego, ajusta tu posición más lejos o cerca del micrófono dependiendo del volumen que buscas tener en tu grabación. Recuerda que mientras más cerca estés del micrófono, el sonido será más fuerte y posiblemente más graneado, y viceversa. Mientras que si es posible cambiar el volumen durante postproducción y hacerlo consistente, usar correctamente tu micrófono te ayudará a reducir el tiempo que pases editando.
CUIDA TU RESPIRACIÓN
Respirar es completamente normal, todos tenemos que respirar, pero al controlar tus sonidos al inhalar y exhalar puedes evitar los molestos sonidos de aire en tu grabación. Para inhalar más calladamente, siéntate con la espalda recta, trata de hacer tu respiración más leve, o aleja tu boca del micrófono cuando necesites tomar una bocanada de aire.
MANTÉN TU CUERPO QUIETO
El moverte mucho puede causar ruido de fondo en tu grabación y esto ocurre especialmente si tienes auriculares. El cable está cerca de tu pecho lo que puede causar que se pegue contra tu camisa o tu clavícula. Trata de mantenerte quieto en tu silla con los pies firmes en el suelo. Evita mover cosas de tu escritorio. Si usas notas escritas sobre papel, trata de no moverlas demasiado si es posible.
RESUELVE CUALQUIER PROBLEMA EN EL AUDIO LO ANTES POSIBLE
Haz una prueba de audio antes de comenzar oficialmente tu grabación. Si hay un problema con el micrófono de tu invitado, o puedes escuchar sonidos de fondo, como perros o construcciones, no te fuerces a continuar. Identifica cuáles son los problemas de sonido antes de empezar, o incluso haz una pausa antes de grabar. En el peor de los casos puedes acabar grabando un episodio completo solo para darte cuenta que hay un problema en la grabación que no se puede editar.